jueves, febrero 03, 2011











Dicen por ahí que “la desgracia de llegar a cierta edad es haber sido joven”, pero como este proceso de envejecer es una ley natural inevitable, debo decir que con reuniones, convivencias, malones, juntas como las de los “MUJIK” del vienes 28 de enero este dicho se debe cambiar a “la gracia de llegar a cierta edad es haber sido joven y haberla pasado muy bien en esa juventud”.















La razón del cambio del refrán es porque esa tarde-noche se pasó muy bien entre anécdotas y chistes que tienen que ver con ese pasado común que, como dice el polilla, “ha creado un lazo indisoluble” entre un grupo grande de jóvenes de finales de la década del 60 y de ahí en adelante hasta estos días y quizás hasta cuando.













Cabe destacar la dedicada atención del anfitrión Víctor Mena y de su esposa Verónica Vergara quienes pusieron su casa a disposición, chirimoyos incluidos (recordar que muchas de las vivencias juveniles del pueblo pasaron cerca o debajo de un chirimoyo).







































También es necesario resaltar la terquedad de Diego Espinoza, quien se empeña en organizar este tipo de reuniones que mantienen el espíritu de esa magia antigua de los mujik.












Finalmente invitar a las siguientes reuniones a todos los que por cualquier motivo no han podido asistir, la lista es larga así que no daremos nombres.